El mayor de los enemigos de una persona que desea bajar de peso es el sedentarismo. Llevando una vida sedentaria es muy fácil coger sobrepeso, engordar y no perder esos kilos que nos sobran. La vida sedentaria es aquella en la que el movimiento y esfuerzo físico es mínimo y no es lo suficientemente intenso para mantener nuestro cuerpo sano.
Del trabajo a la oficina, sentado toda la mañana, luego a comer. Por la tarde oficina otra vez, luego a ver la televisión en casa y finalmente a dormir. Esta es la vida de millones de personas. Si a esto le sumamos comidas copiosas, no hacer deporte y poca actividad sexual estamos frente a un estilo de vida poco sano.
Lo ideal es que aumentemos gradualmente nuestra actividad y no necesariamente tiene que ser con deportes muy exigentes. Con agregar caminatas, algo de bicicleta o nadar podemos mejorar verdareramente nuestro estado físico y, si lo deseamos, aumentar luego nuestra actividad con otros ejercicios más intensos.
Hábitos saludables como ir al trabajo caminando, en bicicleta, nadar, bailar, innovaciones en la vida sexual, etc, pueden ayudarnos a mantenernos saludables, no engordar y, con un poco de control sobre las comidas, podemos incluso perder peso de forma saludable y permanente. Lo importante es que nuestro estilo de vida nos mantenga sanos y en un peso adecuado.
